lo hermoso que tienen los niños es que son extremadamente curiosos y generalmente desafían las cosas. por supuesto, sus cerebros son fuentes inagotables de inspiración y aún no han sido influenciados por juicios o prejuicios que, por lo general aparecen en la adultez. por ello, en optima, tratamos de imitar esta curiosidad natural en nuestra práctica de diseños.

buscamos ideas con incentivo, hablamos sobre caminos potenciales con optimismo y siempre desafiamos los límites de la curiosidad, al igual que los niños, porque nunca se sabe dónde nos puede llevar. y, por lo general, los resultados son sorprendentes.